Hay aldeas en mi mente,,, de cortesanos hirientes,,,
De caballeros disfrazados de lujuria,,,
De aristócratas hechizados por la lascivia,,,
De hidalgos dimanantes de impudicia,,,
Hay aldeas en mi mente,,, de villanas perniciosas,,,
De damas enmascaradas de libertinaje extremo,,,
De matronas embrujadas por dudosa pureza,,,
De mancebas procedentes de la desvergüenza obscena,,,
No quiero endiosar el aire,,, con letras envenenadas de cordura,,,
Ni tan siquiera siento calor de atrevimiento,,, para plañir escarchas de locuras,,,
Siento arder el color de mis secretos,,,
Siento el ansia de unos labios inexpertos,,
Siento y deseo un cuerpo a cuerpo,,, para combatir un sexo sin premura,,,
Parezco manzana herida,,, con brillo antinatura y comedida,,,
desoyendo el llanto del designio,,,
desdeñando agónico desconsuelo,,,
Y si amanece con el sudor sobre mi cama,,, ahogaré la almohada con un grito mudo,,,
Porque sin querer pensar no dudo,,, que entre la luna y el sol me muevo,,, y en su eterno regazo vivo,,,